NO SE TURBE VUESTRO CORAZÓN - V DOM. DE PASCUA
Nunca como hoy se nos ha ofrecido tal multitud de caminos para andar por la vida, y quizá más de una vez nos hemos preguntado: «¿Qué camino he de seguir?, ¿dónde está la verdad?, ¿qué es y dónde está la vida?». Pues el evangelio de este domingo nos responde que Jesús es el camino, la verdad y la vida.
El Dios de la revelación cristiana no es un Dios que se desentiende de nosotros, sus hijos, sino que es un Dios que se preocupa, cuida y se hace presente en nuestra historia a través de su Hijo Jesús. Por eso quien ve a Jesús ve al Padre; quien conoce a Jesús conoce a quien le ha enviado.
En la humanidad de Jesús Dios se ha hecho camino, verdad y vida para que todos nosotros podamos llegar hasta el Padre y compartir con él nuestras alegrías y tristezas, nuestras victorias y derrotas; en definitiva, nuestra vida.
Jesús quiere que vivamos en unión con su Padre: por eso hoy nos dice y se presenta como el Camino que nos acerca a Dios; como la Verdad que nos ilumina y mantiene encendida la luz de nuestra fe, y como la Vida de Dios en nosotros.
Nos cuenta el Evangelio que, ante el temor y la angustia, Jesús consoló y confortó a sus discípulos. Hoy, en medio de nuestras angustias y tristezas, Jesús también nos dice: «Tranquilos, no perdáis la calma: creed en mí; yo soy el camino, la verdad y la vida. Yo os puedo conducir por el camino que lleva a la vida en plenitud».