Artículos de Fr. Jesús Mendoza González
Santo Domingo comprendió que el Evangelio nos dice que para ser felices no hay que evitar la realidad que nos rodea, sino partir de ella; no obviarla, sino hacerla presente.
Hablar de la madre de Jesús como protectora de la Orden, es decir nada más y nada menos que ella es nuestro ejemplo de contemplación del misterio de la Encarnación.