

"Nuestra vida está llamada a ser cristianos por vocación: no interrumpe nuestra historia, no ignora nuestros sueños; nos lleva a la construcción de una historia de amor que nos hace plenos en las manos del Eterno Amor".
«Yo soy el retoño del linaje de David, el lucero radiante del alba» (Ap 22, 16)
"Desde el encuentro con los seres queridos, enviemos al mundo un mensaje de esperanza y de amor que nos hace felices, porque el Señor está con nosotros".
"El próximo sábado 22 de diciembre cumplimos 802 años desde que la Orden de Predicadores recibió su aprobación pontificia. Al final somos muy mayores, ¿verdad? Cabe preguntarnos: ¿Seguimos aportando algo a la sociedad?"
"Un amor desinteresado y generoso con los demás, convencidos del regocijo, júbilo y alegría de la espera, para poder transmitirlo a quienes nos rodean".
«¿Qué hacemos los cristianos para que el sentido de la Navidad no se pierda?, ¿cómo nos preparamos mejor para esta fecha?
«Una voz grita en el desierto»; es la voz de Juan el Bautista, la voz de Dios que nos invita a una nueva vida. En el desierto la voz grita porque el silencio permite que el sonido llegue lejos.
"La esperanza que nos invita a vivir la Iglesia en el Adviento no es una dirigida hacia un pasado ya vivido, sino una esperanza en el porvenir".
A veces estamos felices, otras tristes (y nos angustiamos por diversas situaciones), pero siempre amanece un nuevo día y seguimos adelante: «Dios a nadie desampara».
"Campeaba y lucía a los ojos de todos con gran admiración, veíanle muy despegado del mundo y muy ajustado con la profesión de verdadero hijo de Santo Domingo, imitador de sus raras virtudes y santidad".