Blog

Blog



Sección: A la escucha

Acudiendo al bautismo, Jesús reconoce la acción salvadora de Dios presente ya en la actividad de Juan, su precursor. El ministerio de Juan y el bautismo de Jesús preparan la actividad del “Hijo amado”, del predilecto de Dios.
En nuestra vida estamos tentados a ponernos en el centro de todo, a engordar desordenadamente nuestro ego, de abusar de la expresión “es que yo soy…”. Juan el Bautista nos da el remedio. Ante esas preguntas, que son nuestras tentaciones diarias, responde rotun
La paciencia de Dios para con nosotros es señal de su benevolencia y misericordia. Nos invita al arrepentimiento y la vigilancia, es decir, a vivir día a día de acuerdo con las enseñanzas de Jesús.
"Lo sorprendente no va a ser el juicio, ni la separación. Lo sorprendente es lo que se va a exigir en ese juicio, que no es otra cosa que la máxima de la caridad, es decir, cómo nos hemos comportado con los demás, nosotros que pertenecemos al rebaño de Cristo"