

Sección: A la escucha
«El Hijo del hombre ha venido a buscar y a salvar lo que estaba perdido»
Un corazón sincero y arrepentido, un corazón capaz de amar y sentir la compasión por el hermano, por el que sufre, por aquellos que nada tienen, eso es lo que quiere el Señor.
La oración sirve para vivir con sentido, con gozo, con esperanza
María, cuando nos acercamos a ella, en todo momento, también en el rezo del rosario, nos brinda su ilusión para que nos apropiemos de ella y vivamos la alegría que encierra.
La fe es una nueva luz en nuestra vida que nos permite una compresión de mente y una entrega total de corazón.
Los pobres dejaran de ser una cifra de las estadísticas del hambre cuando les pongamos nombre y rostro a los que están echados a nuestras puertas.
Confesar a Jesús como Mesías y salvador no es una fórmula racional sino que es el reconocimiento en su persona, del amor de Dios, que hace nuevas todas las cosas
El pecado se lava con perfume y lágrimas, arrepentimiento y obras por cambiar. Sólo con amor se vence el pecado
Ante el sufrimiento no hay que buscar explicaciones; hay que tomar partido a favor del que sufre y en contra del sufrimiento.
Cada vez que compartimos la eucaristía no es nuestra propia hambre la que saciamos, sino que somos impelidos a saciar el hambre de los demás.